Me
desperté de un sueño (y no hay sorpresa con esto, estaba dormido y me desperté)
Y un
ángel, un verdadero ángel, con forma no humana, pero cálido, cálido, cálido
como el mayor acogimiento y comprensión que alguna vez soñamos.
No hizo
falta que me pida que lo siguiese, porque no decidí seguirlo, simplemente lo
estaba siguiendo. Porque no había otro sentido en ese momento que seguirlo.
Y fuimos
dejando el mundo real, y fui cambiando suavemente el sentido de la vista por el
de la percepción.
Y
seguimos viajando. Que dulce viaje. La palabra "angustia" ya no
existía en mi pecho.
Y en mi
cuerpo casi etéreo Dios me daba la razón en todo.
Que dulce
viaje.
Hasta que
el camino se hizo sinuoso, y angosto. Pero este Ser-Ángel me guiaba y yo no
tenía miedo a nada. Y aparecieron extrañas criaturas como surgiendo de
un lago de fuego. Y me tentaban, e intentaban engañarme; pero yo: nada. Me
entregué a lo que me dictaba el corazón, y la mente la relajé hasta encontrar
el punto justo que me lleve a Dios.
Y el
Ángel-Ser me guió. Y se detuvo. Y me soltó. Casi como diciendo: "yo te
guié hasta acá, solo vos podes atravesar esa puerta". Y miré, y había un
umbral. Y ahora sí me detuve a pensar. Y deje pasar el tiempo. Y el tiempo
pasó.........
...............
me desperté de mi pensamiento. Miro hacia atrás, no hay nada de nada: ni camino,
ni criaturas siniestras, ni abismo, ni inmensidad. Adelante mío hay un
umbral, son las puertas del infierno
MALDITO ANGEL!
Rechazar algunas tentaciones también puede ser peligroso.
ResponderEliminarComo elegir el camino? a que apuntar? en quien creer?
EliminarMomento-Podrías argumentar- ¿Y mi libre albedrío?
ResponderEliminarmi libre alberdrio lo manifesté cuando confundi demonios con angeles
EliminarMenos mal que despertaste, qué cosa si te nos quedas por allá!
ResponderEliminarHay que explorar lo desconocido, pero siempre tratar de volver de las tentaciones. (¿Para caer en otras?) Umm…
Un beso
Un beso Vivian, siempre son dulces tus comentarios
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